domingo, 7 de octubre de 2012

La violencia en la familia, un duro aspecto de la opresión.



La violencia en la familia, un duro aspecto de la opresión.
Por Josefina Rincón
Este artículo se escribió sobre la base de muchas conversaciones, discusiones, preguntas, respuestas, críticas y autocríticas, entre muchas camaradas, compañeras, amigas, que en los barrios, desde la Escuela de Psicología  Social, Enrique Pichón Riviere de Buenos Aires o de su simple llegada militante, aportaron a este trabajo. No están reflejados aquí todos los grupos que están trabajando, por distintos motivos no pudimos llegar o no alcanzamos a recibir sus aportes.
La gran participación de las mujeres en la vida social y política de los últimos años ha puesto en evidencia las heridas más profundas que sufrimos en la sociedad. Heridas y dolores ocultos tras una fachada de “familia refugio”. Los maridos se quedaron sin trabajo, algunos se fueron de las casas, muchas mujeres se quedaron a cargo. Tuvieron que salir a trabajar cuando les habían dicho que su lugar era el hogar y su deber exclusivo el cuidado de la familia, y no estaban preparadas para eso. Las que no consiguieron trabajo, salieron a luchar para solucionar el hambre de la familia. Las que tienen trabajo, una profesión, un oficio y no quieren perderlo, viven a diario los bajos salarios y condiciones precarias de trabajo,  y además la discriminación, el abuso, el acoso, las diferencias salariales.

CLARIFICACIÓN DEL MITO DEL 8 DE MARZO



8 de marzo
Día internacional de la mujer obrera
A continuación presentamos parte de un artículo de ANA ISABEL ÁLVAREZ GONZÁLEZ (1999) publicado en Espai de Dones, donde ella expone,  versiones, fuentes y aclaraciones que dan origen al 8 de marzo. 
Los orígenes y la celebración del Día Internacional de la Mujer, 1910-1945
CLARIFICACIÓN DEL MITO DEL 8 DE MARZO
por ANA ISABEL ÁLVAREZ GONZÁLEZ
El nacimiento del Día Internacional de la Mujer, contrariamente a lo que se creía en todos los foros, no radica en un acontecimiento aislado, sobre el que ni tan siquiera existía consenso entre la historiografía norteamericana y la española, sino que ha de encuadrarse en un contexto histórico e ideológico mucho más amplio.